Qué es la fractura del tubérculo mayor del húmero: tratamientos
Es una de las fracturas más habituales entre los deportistas, personas mayores y aquellos que sufren de osteoporosis, pero, ¿por qué afecta a tantos grupos y por qué sucede con tanta frecuencia? La respuesta es clara, el tubérculo mayor del húmero es una zona clave en la inserción de músculos del manguito rotador, lo que lo convierte en un punto vulnerable ante traumatismos directos, caídas con el brazo extendido o movimientos bruscos.
¿Qué es el tubérculo mayor del húmero?
El tubérculo mayor del húmero o troquíter, es una prominencia ósea que se encuentra en la parte superior del húmero, que es el hueso largo del brazo. Es un punto clave de inserción muscular, ya que varios músculos del manguito rotador se canalizan en el tubérculo mayor, lo que lo convierte en esencial para la movilidad y rotación del hombro.
Los músculos que se insertan en el tubérculo mayor del húmero son de tipo supraespinoso, infraespinoso y redondo menor. Gracias a ellos, podemos realizar movimientos como la abducción o la rotación externa.
Al unir tres músculos, es un punto clave a la hora de realizar movimiento, por lo que dañar el tubérculo mayor afectaría a la movilidad y estabilidad del hombro.
👉Mira aquí las lesiones que genera una fractura de troquíter.
Causas más comunes de una fractura del tubérculo mayor del húmero
Una fractura del tubérculo mayor del húmero puede darse por distintos casos. En todos ellos, se infringe una lesión en el tubérculo que lo resiente y provoca dolores a la hora de ejercer movimiento.
Algunas de las posibles causas que pueden generar ese dolor son:
Caída sobre un brazo hiperextendido
Caer con el brazo en una mala posición, especialmente si está hiperextendido y se aplica fuerza directa sobre el hombro, puede causar dolor en el tubérculo mayor e incluso afectar toda la zona, llegando a provocar una fractura.
Sufrir osteoporosis
Padecer esta enfermedad supone mayor facilidad para que se genere una fractura, ya que el debilitamiento de los huesos hace que se infrinja un daño superior al habitual en caso de un golpe en la zona.
Esta enfermedad suele verse más activa en personas mayores, quienes suelen sufrir también de fracturas del húmero proximal.
Sufrir un accidente de tráfico o deportivo
Cuando se sufre un accidente de coche, el cinturón infringe una fricción fuerte y constante en la zona del hombro, donde se encuentra la cresta del tubérculo mayor del húmero.
Es en ese momento, cuando la zona se resiente y este golpe provoca una fractura, acompañada de más daños generados en el hombro.
En Artrocare, somos especialistas en tratar las lesiones en hombros que se generan en deportistas, por lo que contamos con los expertos necesarios para tratar este tipo de lesiones.
Síntomas de la fractura del tubérculo mayor del húmero
La intensidad del dolor puede variar, pero los síntomas suelen seguir siempre el mismo patrón de manera clara.
Inflamación
Visualmente vemos como la zona, tras el golpe, comienza a inflamarse y a mostrar hematomas, informándonos de que el daño infringido está provocando consecuencias visibles.
Dolor al movilizar el brazo
El síntoma más conocido de una fractura es el dolor agudo o la incapacidad a la hora de mover e intentar levantar el brazo, ya que está haciendo uso de músculos que requieren del tubérculo mayor, el cual está resentido. Esto genera un malestar si se realiza un movimiento.
Debilidad muscular
Se puede llegar a tener la sensación de que se ha perdido fuerza, o que cuesta más que antes realizar un movimiento o cargar algo pesado.
Esto se debe a que, si contamos con una fractura, sentiremos antes dolor en la zona, creyendo que nuestra fuerza se ha debilitado.
Tratamientos para la fractura del tubérculo mayor del húmero
Para subsanar el dolor que supone una fractura del tubérculo mayor del húmero, se suelen plantear tres tratamientos que pueden solucionar o aliviar el dolor que esta fractura genera.
Uso de cabestrillo
Si el profesional considera que con reposo de la zona y analgésicos para el dolor es suficiente, sirve con mantener el brazo doblado en cabestrillo, durante el tiempo que se considere necesario, y que la fractura se cure por sí misma.
Realizar una cirugía
Cuando la lesión se convierte en un problema constante, se toma la opción de aplicar cirugías como la artroscopia de hombro que realizamos en Artrocare. Esta técnica no solo aplica para la fractura del tubérculo mayor, sino también a las lesiones tendinosas o en casos más extremos, las roturas.
También cuando hay desplazamiento significativo del fragmento, suele considerarse la cirugía como primera opción. El procedimiento suele implicar la fijación del fragmento óseo con tornillos o placas para restaurar la correcta e indolora movilidad del hombro.
Rehabilitación para la movilidad del hombro
Existe el caso en el que aún habiendo aplicado alguno de los tratamientos anteriores, se necesita realizar rehabilitación adaptativa del brazo y hombro.
A esto se le denomina rehabilitación temprana asistida.
Rehabilitación tras una fractura del tubérculo mayor del húmero
En la mayoría de casos, cuando el profesional ha optado por la realización de cirugía o del uso de cabestrillo, se requiere de rehabilitación post tratamiento. De esta manera se evita la rigidez de la zona y se fomenta la correcta movilidad de nuevo.
Este proceso puede durar desde días a semanas, dependiendo del proceso adaptativo del paciente y la complejidad de la lesión tratada.
Los ejercicios más comunes en el proceso de rehabilitación son:
Movilización pasiva
Al principio de este proceso, se evita realizar movimientos pasivos para no contrarrestar el proceso de fijación ósea y asegurarnos de que no deshacemos los pasos logrados con el tratamiento realizado.
Ejercicios de rango de movimiento
En este punto, el profesional ya considera correcto empezar a movilizar la zona a través de ejercicios que incluyan abducción, flexión y rotación externa del brazo para recuperar el rango de movimiento.
Ejercicios de resistencia
Una vez la zona ya ha asimilado los movimientos y está lista para asumir fuerza aplicada sobre él, se añaden ejercicios de resistencia.
Estos suelen realizarse con bandas elásticas y ejercicios con peso, su función es fortalecer los músculos del manguito rotador y estabilizar la articulación del hombro para que se pueda volver a hacer vida normal tras la cura de la fractura.
En Artrocare, nuestro objetivo es que superes cualquier tipo de lesión, incluyendo la fractura del tubérculo mayor del húmero, por eso en este post compartimos contigo todo lo que debes saber acerca de los distintos tipo de lesiones en hombro.
